El Socialismo la puerta al placer y la riqueza

Alquimedes Romero-. En cada proceso electoral que se ha desarrollado en Venezuela desde la llegada de la Revolución Bolivariana en el año 1999, el venezolano que apoya el proyecto de país anclado en el ideario bolivariano y Socialismo ha respetado una línea que los dirigentes han literalmente “impuesto”, sin embargo, las expectativas con los gobernadores, diputados, alcaldes y ediles no se han alcanzado. Las necesidades de la mayoría no han sido atendidas. La decadencia en el país petrolero se vislumbran por doquier ante un gran número de obras y proyectos sin culminar. 

En jornadas electorales el ciudadano participa con la esperanza de que los problemas colectivos serán resueltos, por lo menos los servicios públicos pero, la realidad es otra, cada palabra que profieren los candidatos en campaña se las lleva el viento, cuando arriban al Poder todo queda en promesas sin cumplir. Usan la demagogia como trampolín. 

Ese juego con el pueblo ha desatado un modo de anarquía política, el Soberano se cansó de que le vean la cara y ahora no respeta línea, acción  observable en los últimos sufragios, situación que devela un descontento popular y, no está demás recordarle a los políticos que ellos no son artistas, son servidores públicos elegidos por el ciudadano en procesos de elecciones libres. 

La eficiencia con la que inició la Revolución ha mermado. La confianza del pueblo se ha ido desvaneciendo, si los líderes no recapacitan y hacen correctivos se perderá el proyecto país iniciado por Hugo Chávez Frías. 

Que tristeza observar que muchos políticos del chavismo, aunque tanto critican el Capitalismo gozan de sus placeres y deleites, pareciera que solo citan un discurso que no sienten, simplemente repiten como el loro. Con este comportamiento qué alejados están de la doctrina socialista que pregonan o serán solo oportunistas. Es insólito que por más de 19 años la idea del Socialismo haya sido usado para como puerta al placer y la riqueza. El pueblo está viviendo de migajas, de limosnas que le dan los dirigentes. Venezuela es un país petrolero y además posee grandes riquezas, así que los políticos de ahora no se deben valer de llamada guerra económica o bloqueo para solapar su ineficacia. 

Lo quieran admitir o no, el chavismo ha perdido fuerza y los responsables de este quiebre es toda la estructura del gobierno, desde el Presidente, vicepresidente, ministros gobernadores, alcaldes y concejales quiénes son los que están más cerca del ciudadano. En vez de atender, pierden el tiempo encerrados en sus comodidades. 

La idea no es mantener el mapa de Venezuela pintado de rojo. El objetivo, si de verdad es lo que desean como socialistas es dar respuesta al público. Ya basta de “pelotear” a la gente, de tanta burocracia para dar ayudas. El pueblo se siente usado y poco a poco el vaso se llena y rebosa. El Socialismo es inclusión e igualdad, no a conveniencia como lo usan los políticos venezolanos.

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